Tlachinollan es el nombre antiguo de Tlapa. Fue un reinado gobernado por los pueblos Na’Savi y Me’phaa, de 1300 a 1465. Actualmente se ubica en la zona oriente del estado de Guerrero. Es una de las 7 regiones del estado, conocida como Montaña de Guerrero. Se caracteriza por una orografía sumamente escabrosa, por ser parte del macizo montañoso conocido como la Sierra Madre de El Sur. Abarca 19 municipios, donde se encuentran asentados los pueblos Me’phaa, Na’Savi y Naua, cuyos hablantes de acuerdo al censo de población del INEGI del 2010, se tiene un registro de:
En la parte nororiental colinda con los pueblos de la mixteca poblana y la mixteca oaxaqueña. En la zona sur cohabita con los municipios identificados como de la Costa – Montaña, como San Luis Acatlán y Ayutla de los Libres. En la parte occidental colinda con los municipios de la Montaña baja: José Joaquín de Herrera (Hueycatenango), Chilapa de Álvarez y Ahuacotzingo.
Es una región que en la época prehispánica era la ruta comercial de los pueblos del altiplano con la región del Pacifico. El pueblo Mexica extendió sus dominios en los limites con el reinado de Tlachinollan. Existen documentos cartográficos, como lienzos y códices donde hablan de estas disputas territoriales entre el pueblo Mexica y los pueblos del reinado de Tlachinollan.
En la época de la conquista, la región de la Montaña fue también parte del botín de guerra de los españoles por tener información de que era una región rica en oro. Hernán Cortés incorporó este corredor de la mixteca como parte de su encomienda. Pedro de Alvarado incursionó hasta San Luis Acatlán con la finalidad de tener el control de la Costa y la Montaña para el traslado de mercancías y metales preciosos que formaban parte del gran botín de los conquistadores, ante la crisis económica que enfrentaba España.
A pesar de que la Montaña ha sido un gran reservorio de bienes naturales y de una gran riqueza cultural y arqueológica, secularmente ha sido excluida y discriminada por parte de los gobiernos criollos y mestizos del centro del país. La Montaña de Guerrero, se ha transformado a lo largo de la historia en una región marcada por el atraso y el abandono secular. En esta región se ubican los municipios más pobres del país, ocupando los primeros lugares Cochoapa el Grande y Metlatónoc, donde se encuentra asentado el pueblo Na’Savi.
La ciudad de Tlapa se le conoce como el corazón de la Montaña por ser el centro económico, político, religioso y multicultural de la región. En los últimos 50 años, ha tenido un crecimiento poblacional desmedido y desordenado, que se expresa en los contrastes sociales y económicos, entre la población mestiza y la población mayoritariamente indígena. En Tlapa se condensa la desigualdad social y el caos urbano atribuido a gobiernos municipales sumamente corruptos, que en los últimos trienios se
ha vinculado con grupos de la delincuencia organizada. Es una ciudad que carece de los servicios básicos como agua para todas las colonias, servicio de energía eléctrica para toda la población, drenaje en buenas condiciones y un relleno sanitario que no contamine los mantos freáticos.
En los últimos tres años Tlapa forma parte de las ciudades más inseguras del estado por el alto índice de homicidios y de personas desaparecidas, que lamentablemente las autoridades no han investigado, siendo un factor que robustece la impunidad y encubre a los perpetradores. Tlapa forma parte de las ocho ciudades que cuentan con la declaratoria de la Alerta de Violencia de Género contra la Mujer, emitida por la Secretaria de Gobernación en el año 2017.
Es en esta ciudad donde se encuentra nuestra oficina matriz ofreciendo diariamente los servicios gratuitos a la población indígena, afromexicana y mestiza, de la Montaña y Costa Chica de Guerrero. Es un trabajo comprometido con las víctimas de la violencia, con la defensa de territorio de los pueblos indígenas, contra la desigualdad y el racismo para que la justicia habite entre los pueblos Me’phaa, Na’savi, Naua, Afromexicanos, Ñomndaa y Mestizos.
