Marchan contra feminicidios en la Montaña

Tlapa, Guerrero, a 7 de diciembre de 2023. Con los gritos de justicia por los feminicidios en el municipio nahua de Copanatoyac, los familiares, mujeres solidarias y colectivas hicieron eco en las principales calles para repudiar la violencia contra las mujeres y niñas indígenas en la región de la Montaña. El municipio nahua es un foco rojo de feminicidios. Sólo de los que se tiene información son 7, el último es el de Margarita Vargas Florentino, acaecido en la madrugada de este 3 de diciembre. Todos están en el fango de la impunidad. Los feminicidas son intocables, son protegidos por las autoridades, y hasta tratan de silenciar a las familias para que se queden en el olvido. Exigieron a la Fiscalía Regional, ubicada en Tlapa que agilicen las investigaciones en el caso de Margarita, Maricela, Abelina Olivares y Kenia López.

Al filo de las 5 de la tarde, la marcha empezó en el arco de la colonia Aviación de Tlapa, donde se conglomeraron mujeres, niñas, niños, hijos, hijas, madres y padres de Margarita, Abelina, Kenia y Maricela, asesinadas por sus esposos. Decenas de familias se solidarizaron para exigir justicia. En la caminata relucían los carteles alusivos a los feminicidios en el municipio de Copanatoyac.

El hartazgo de las mujeres y niñas se observó en sus carteles con los siguientes mensajes: “Ni una más; Mago merece justicia; Si tocan a una, tocan a todas. Abelina en tu nombre exijo que caiga el feminicida; el PRI ha gobernado durante más de 15 años, y desde Entervio Reyes, Jorge Aguilar, Manuel Ayala, Francisco Campos y ahora Eleuterio Reyes han resultado unos ineptos, mientras tanto las disque las organizaciones que protegen a las mujeres ¿en dónde están?; hoy no están todas las voces porque desde la tumba no se puede gritar; urge la detención de los feminicidas; somos el grito de las que no están; gritemos juntas por los hijos que están pidiendo al cielo que ellas regresen; que los ojos de las asesinadas los sigan a todas partes y el llanto de sus madres no los dejen dormir; si un día me matan abracen a mi mamá y a mis hijas: justicia para Abelina y Kenia; exigimos paz no balazos, ni abrazos de condolencia; no tienes derecho a quitarme mis sueños, por eso lucharé por mis derechos, y justicia para Mago; alto a la violencia feminicida”…

Realizaron un mitin en la presidencia municipal de Tlapa, donde colectivas mencionaron los municipios con alertas de género como Acapulco, Ayutla, Chilpancingo, Coyuca de Catalán, Iguala, Zihuatanejo, Ometepec, Tlapa y Chilapa. En esta tesitura, “exigimos una alerta de violencia de género para el municipio de Copanatoyac, ante todos estos crímenes de odio cometidos contra las mujeres y exigimos garantías para una vida libre de violencia para todas las mujeres. Cuando no hay justicia para las mujeres, el mensaje está claro para los feminicidas, no pueden cometer estos delitos y tener la complicidad del Estado para hacerlo. Cómo tendremos certeza de que nuestras denuncias van a ser escuchadas si en las instituciones existe una constante revictimización hacia nosotras. No es que no denunciemos, es que no nos creen, es que no les importan nuestras vidas, es que la justicia es machista, patriarcal y opresora”.

La marcha continuó a las instalaciones de la Fiscalía Regional, ubicada en Tlapa. A las 7 de la noche las manifestantes llegaron, ahí estaba la guardia nacional y el personal de inmediato cerró sus cortinas. Las manifestantes dieron la frente a los funcionarios. En otro mitin los familiares exigieron justicia, y señalaron que de acuerdo con el Centro de Derechos Humanos de la Montaña Tlachinollan hay 71 feminicidios en la región, en el periodo de 2014 y 2021.

En el micrófono, don Luis Vargas, papá de Margarita, desde el fondo de su corazón demandó que no quede sin justicia el feminicidio de su hija. “Cuando venimos a poner la denuncia, la mamá del agresor o asesino ya traía su abogado. Si no tiene miedo, por qué tiene que traer abogado. Les pido como padre, con mi familia, aquí tengo a mis hermanas, mis hermanos, mis paisanos, amigos, amistades de todos los pueblos que nos acompañan para pedirles que agilicen esa demanda, las investigaciones para que se castigue al responsable. Se los pido como padre. Vamos a tocar las puertas de la justicia, no importa si tenemos que hacer marchas, ir a Chilpancingo o a la Ciudad de México”, sentenció Luis.

El temor de las familias es que el feminicida compre la justicia porque anteriormente estuvo alrededor de tres meses en la cárcel de Acapulco debido a que lo encontraron con armas y drogas, sin embargo, “salió de la cárcel porque su mamá pagó. Les pido que no se venda la justicia porque la señora tiene mucho dinero y va a pagar, pero mi hija ni por un millón de pesos va a volver. Yo quiero justicia para ella. Yo hablo con mi cara en alto porque así fueron mis padres y así me enseñaron, por nadie me dejé agachada. Si me buscan por algún problema salgo de frente. Así les pido a todos ustedes que me hagan justicia con mi hija porque la mataron sin piedad. No me voy a arrepentir el día que yo lo vea en la cárcel (al agresor, Pavel Bernabé) para gritarle en su cara que va a sufrir horas amargas, así como yo estoy sufriendo ahorita. Hablo por todas aquellas jóvenes que han matado y no les han hecho justicia”, exigió a la Fiscalía doña Guadalupe, mamá de Margarita.

A este reclamo también se sumó doña Eduviges, la mamá de Abelina y Kenia, víctimas de feminicidio en Tlalquetzalapa, municipio de Copanatoyac, para señalar: “no nos hacen justicia porque somos gente humilde, no tenemos dinero con que pagar la justicia. Nos tiene que ayudar, señor Fiscalía, por eso venimos a acompañar a esta gente porque apenas mataron a una muchacha (Margarita), y que nos hagan justicia, eso pedimos señor Fiscalía. Hagan lo posible para hacer su mandato de que los busquen. El que mató a mis hijas está en su casa, está viviendo con su mamá, pero nosotros no lo podemos agarrar porque no tenemos dinero, ustedes tienen armas para detenerlo y por eso les venimos a molestar esta noche”.