NOTA INFORMATIVA | El poder local y el bastón de mando: «el comisario tigre»

Tantas y tantas conciencias hay,

callada sabiduría escuchas en la niebla y

 en el bosque donde te siembran…

Acatepec, Guerrero, a 17 de enero de 2021. Los rostros posan con estricta seriedad casi como el silencio en la explanada del ayuntamiento municipal. Todos con sus bastones de mando mirando al frente, muy poco cruzan palabras. Serían como a las 11:00 de la mañana cuando el secretario municipal empezó a mencionar a cada una de las comunidades indígenas que tomarían protesta.

Comisarios municipales y delegados permanecían atentos para escuchar el nombre de sus comunidades. La mayoría eran mayores de edad. Los principales (personas que dan consejos) acompañaban a sus autoridades, muestra de respeto y sabiduría.

Como a las 11:40, en me’phaa, dieron las indicaciones para que las autoridades nuevas recibieran el bastón de mando por los salientes. Con forme a una lista fueron pasando de una en una a la mesa del presidio del presidente municipal de Acatepec. Las autoridades salientes dejaban el bastón de mando en manos del presidente, luego pasaban las nuevas autoridades para recibirlo, así sucesivamente. Después de que pasaron todas las comunidades el presidente les tomó protesta como las nuevas autoridades. Serían los nuevos guardianes del pueblo, quienes verán por los problemas si acaso se presentan.

Se dio la protesta a 76 comisarios y delegados, sin embargo, antes se había realizado el mismo acto en la comunidad de Caxitepec de 35 comisarios y delegados y en la comunidad de El Aguacate de 19 autoridades. Son 130 comunidades indígenas donde se renovaron las autoridades. El ritual de cambio de autoridades en algunos pueblos termina el día sábado 23 de enero de 2021 con un baño en los ríos entre 4:00 a 5:00 de la mañana.

Las comunidades indígenas de la Montaña acostumbran hacer el cambio de autoridades en las primeras semanas de enero. Es el momento en que la justicia está ausente, una vez terminado todo el ritual que realizan la justicia vuelve. Es el caso de la comunidad de Zilacayotitlán donde se ofrenda un gato a la tierra para que las autoridades no tengan problemas en su periodo, pero también para que las personas no se enfermen. El poder debe ser el equilibrio en la vida comunitaria.