Comandante Toño:
Hijo predilecto de la estirpe de la lluvia.
Chavo solidario del barrio histórico de san Antonio.
Camarada entrañable de la gente del campo.
A tus 28 años forjaste tu acero
en los caminos escabrosos de la Montaña.
Con el estómago vacío alimentaste
tu espíritu combativo.
Nada te arredro.
Ni los golpeadores de los gobiernos usurpadores.
Ni las llamas de las lonas quemadas
frente al palacio municipal.
En esa noche tu silueta mostró tu temple y tu valentía.
Nada te detuvo para abrazar la lucha de los 43.
El plantón de 8 meses en el ayuntamiento de Tlapa,
mostró la casta y la resistencia de hombres y mujeres dispuestos a encarar al poder, y a desenmascarar sus tropelías.
La detención arbitraria de 8 compañeros perpetrada por el ejército,
el día de las elecciones,
hizo tañer las campanas del barrio del Tepeyac.
La ira ciudadana retuvo a la mala a 35 policías federales y los encerró en su capilla.
Las mujeres formaron el primer cinturón de seguridad.
Nada les garantizaba salir bien librados.
Su libertad pendía del retorno de los detenidos.
El miedo a la furia de los pobladores,
y ante el temor inminente de ser desarmados,
hizo que una bala asesina de los policías diera en el pecho del
Comandante Toño.
La lucha facciosa por el poder político
lo quito del camino,
creyendo que los sueños de justicia
quedarían sepultados.
Toño, a 5 años de que policías asesinos te arrancaran la vida,
las autoridades federales y estatales han incumplido la recomendación de la CNDH.
Lo más cruento es que la Fiscalía General de la República,
se ha empeñado en archivar la investigación.
La complicidad y el encubrimiento
se mantienen intocados entre las castas del poder.
La justicia tiene que llegar a la Montaña.
Tu testimonio es parte del legado intangible de un pueblo combativo, que lucha contra la impunidad y pelea por la verdad.
! ¡Justicia para Toño!
Junio 7, 2020
Tlapa, Guerrero